La paridad, una realidad aún por construir en los
congresos locales de México
Coordinadora: Ma. Aidé Hernández García.
México:
Instituto Nacional Electoral, 2022.
Eduardo
Torres Alonso |
Universidad
Nacional Autónoma de México – México |
Recibido: 22-12-2022
Aceptado:
10-04-2023
Con
la paridad, conviene mencionarlo, no finalizó la lucha por la igualdad, sino
que se fortaleció: más mujeres en cargos de elección popular –mismo número de
mujeres y hombres en los órganos legislativos, al menos– no significa igual
acceso al poder. Podría resultar paradójico, pero no lo es en la medida en que
el poder, en abstracto, y el poder político, en específico, sigue siendo
pensado como un monopolio masculino, de hombres para hombres. En el Congreso de
la Unión, como en los poderes legislativos estatales, se observa que las
mujeres están en espacios de poca influencia (comisiones soft)
o no integran ni presiden los órganos de gobierno o directivos de las cámaras.
Por
supuesto, el arribo de mujeres a estos espacios de representación no es una
concesión, sino resultado de una lucha de largo aliento que puede rastrearse
desde la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana, en
la época de la Francia revolucionaria, pasado por las sufragistas inglesas y
por los movimientos de mujeres que, en México, impulsaron la modificación de la
Constitución de 1917 que no reconoció la condición ciudadana de las mujeres,
hecho que cambió hasta ya entrado el siglo XX, en 1953.
Examinar
qué ha ocurrido con la reforma de 2014 a nivel subnacional
es la tarea que acometieron un conjunto de autoras y autores, coordinados por
Ma. Aidé Hernández García, en el libro La paridad, una realidad aún por
construir en los congresos locales de México. De entrada, el título ya
expresa una tarea pendiente que la reforma mencionada no ha satisfecho, lo que
contravendría no sólo el espíritu mismo de dicho cambio, sino también el de la
democracia ya que, en una forma de gobierno de este tipo, no se aceptan
exclusiones o discriminaciones de individuos por ninguna consideración,
incluyendo, por supuesto, sexo y género.
Esta
obra es monumental por, al menos, dos razones: la primera, por reunir estudios
de caso de los 32 congresos locales existentes en México y por tener una
extensión de más de mil páginas. A estos capítulos los acompañan una
presentación del presidente del Instituto Nacional Electoral, órgano
administrativo encargado de la organización de los procesos electorales para
renovar los poderes Ejecutivo y Legislativo de la Unión, y casa editora de este
libro; una introducción del grupo de trabajo que llevó a cabo la investigación;
un capítulo que bien puede considerarse como conclusivo –desde una perspectiva
cuantitativa– titulado “Disparidades regionales en la construcción de la
paridad. Los 32 congresos locales de México”, y una sección de bibliografía que
resulta atractiva para quienes estén interesados en estos temas.
Este
libro es una aproximación global a la realidad de la participación política de
las mujeres en el ámbito institucional, en particular, del poder Legislativo.
Le anteceden tres trabajos previos: Entre guijarros: avances y retrocesos de
la participación política de las mujeres en México (2013); Democracia y
paridad en México (2016) y ¿Es la paridad una realidad en los congresos
estatales? (2019). De manera que forma parte de una agenda de investigación
que ha venido consolidándose a lo largo del tiempo con el concurso de
investigadoras e investigadores de distintas partes de la República Mexicana,
reunidas todas estas personas en la Red Temática sobre Mujeres en la Política.
Una
obra que examina tantas realidades requiere una construcción metodológica
rigurosa y pertinente. De entrada, la hipótesis es la siguiente:
“[…] a pesar de que
se ha establecido legalmente la paridad electoral en los congresos locales de
México, aún no podemos hablar de una representación sustantiva al interior de
ellos, ya que aunque los partidos políticos postulan mujeres más jóvenes, con
mayor escolaridad y amplia trayectoria en sus partidos políticos, ellas no acceden
a puestos clave: coordinaciones de las bancadas, órganos de decisión (Junta de
Coordinación Política), ni comisiones estratégicas. No obstante que las
diputadas generan más iniciativas, son los diputados quienes logran mayor
aprobación de éstas; además, persisten conductas culturales de discriminación,
prácticas de violencia política y trato diferenciado entre diputadas y
diputados” (Red de Investigación sobre Mujeres en la Política, 2022: 19).
Como
se advierte al leer dicha hipótesis, existe un interés y preocupación por la subrepresentación femenina en puestos directivos y en la
tasa de aprobación legislativa, en comparación con sus pares varones. El
soporte teórico de los capítulos radica en la discusión sobre la representación
sustantiva, considerando elementos como la transversalización
de la perspectiva de género, la participación de las legisladoras en todos los
temas que se discutan y que los hombres dejen de autoexcluirse de los temas de
género. Se retoman los análisis al respecto de Elena Tapia, Jennifer Piscopo, Gisela Zaremberg; por
supuesto, de Hanna Pitkin,
Mona Lena Krook y Andrea Messing-Mathie.
Algunos
de los hallazgos de la investigación son que la apariencia es tomada en cuenta
y les afecta más a ellas que a ellos, que las diputadas tienen dobles jornadas
laborales, se mantienen espacios extraparlamentarios en donde sólo asisten
hombres, hay acoso hacia las legisladoras, en fin, se desconfía del liderazgo
parlamentario femenino. Cada capítulo tiene una estructura idéntica: 1.
Composición numérica en función del sexo y grupo parlamentario; 2. Perfil de
sus miembros y su trayectoria; 3. Distribución de poder en órganos de gobierno
y comisiones ordinarias; 4. Desempeño legislativo de acuerdo con las
iniciativas presentadas por las comisiones, y 5. Vida cotidiana en el trabajo
legislativo y desigualdades derivadas de las estructuras socioculturales del
patriarcado.
Este
producto de investigación es un texto de consulta de primera mano. Al ser,
precisamente, eso marcará la ruta para nuevos trabajos en la materia que podrán
dar cuenta de otros fenómenos como la participación de las mujeres legisladoras
en contextos de violencia por el crimen organizado o la presencia de diputadas
trans.
Bibliografía
Hernández
García, Ma. Aidé (2022) (coord.): La paridad, una realidad aún por construir
en los congresos locales de México. México: Instituto Nacional Electoral.
Red
de Investigación sobre Mujeres en la Política (2022): “Introducción”. En Ma.
Aidé Hernández García (coord.): La paridad, una realidad aún por construir
en los congresos locales de México. México: Instituto Nacional Electoral,
pp. 15-29.